La ubicación original de Little Baobab ha estado cerrada desde el incendio el 10 de mayo. Foto Joe Finberg

El Baobab, o árbol de la vida, es originario de África. Tiene un tronco ancho y ramas largas como raíces que crecen en el aire.

Durante generaciones, ha sido vital para la tradición y cultura africana, como centro de reunión comunitario para compartir problemas y sanar colectivamente. En 1998, Marco Senghor, que llegó a San Francisco de Senegal, plantó su primer Baobab en la Misión.

Little Baobab, un pequeño y peculiar restaurante y club nocturno ubicado en las calles 19 y Misión —caracterizado por su fachada azul y amarilla, comida caribeña, cocteles de jugo de jamaica, y la fusión ecléctica de música— creó una vibrante y animada pista de baile, que semanalmente atrajo una larga fila de espera en la puerta.

Según Senghor, ganó su reputación en parte por la afinidad del aclamado poeta, músico, y compositor de San Francisco Michael Franti hacia el restaurante de Senghor.

“Después de la firma del contrato de arrendamiento por el local, Michael Franti entró, descalzo como siempre, y me dijo que le gustaba el lugar y estaría de vuelta con sus amigos”, dijo Senghor, mientras recordaba los primeros días de su creación. “Definitivamente puso el lugar en el mapa”.

En 2000 Franti registró un álbum en solitario titulado “Live at the Baobab”.

Con los años se transformó en el hogar de eventos y recaudaciones de fondos, característico por su música africana, latina y mundial, convirtiéndose en el espacio comunitario que Shengor imaginaba.

Walter Vela, también conocido como ‘DJ Walt Digz’, que durante una década ha sido presentador de una fiesta de salsa cubana semanal en Little Baobab dijo: “No es como otros clubes, donde lo fundamental es el negocio. En Baobab se trata de ser una plataforma para la comunidad de la diáspora africana”.

El 10 de mayo, a las 10:30 am, Senghor recibió una llamada telefónica en la que se le informaba de un incendio en Little Baobab. Según el informe del Departamento de Bomberos de San Francisco, el fuego se originó en la cocina del restaurante.

“El jefe de bomberos dijo que el incendio estaba relacionado con un sartén de aceite dejado en la estufa, o por una vieja olla de arroz que se dejó enchufada durante la noche”, dijo Senghor. Él, cree que el incendio pudo ser causado o bien por la falta de mantenimiento del edificio, o por haber dejado enchufada la olla de arroz.

“La Ciudad intervino y dijo que antes de volver a abrir, teníamos que hacer todos estos cambios para que el espacio cumpliera con la normativa”, dijo Senghor. “Ahora estoy tratando de trabajar con el propietario para determinar qué va a pasar con Baobab, pero no ha pasado gran cosa desde mayo”.

En un correo electrónico a El Tecolote, la propietaria Joelle Calton dijo: “Realmente no tengo ninguna idea [sobre el espacio]. Las compañías de seguros están en ello, así como los contratistas y similares. Me siento optimista de que todo saldrá bien, pero ahora está en manos de los profesionales”.

En la actualidad, Little Baobab está cerrado, y protegido con coloridas piezas de madera que cubren las ventanas. Desde el incidente, opera en el Bollyhood, situado al lado.

Le gustaría volver a abrir en su ubicación original, pero reconoce que la Misión está en proceso de cambio. Está pensando en trasladarlo a Oakland.

“Tal vez sea el momento de ayudar a erigir la comunidad allí”, dijo. “Dondequiera que vaya, llevo el espíritu del Baobab dentro de mí”.

—Traducción Emilio Ramón