A partir de esta semana, un tribunal federal ha devuelto a DACA sus parámetros originales establecidos durante la presidencia de Obama: los nuevos solicitantes, los que han sido parte del programa en el pasado y los participantes actuales son elegibles para obtener un permiso de trabajo de dos años.

La Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), es un programa de la era de Obama que permite a los niños indocumentados que han migrado a los EEUU, obtener un estatus legal temporal y una autorización de trabajo si cumplen con ciertos requisitos de edad, educación y presencia. Con más de 800 mil  Dreamers, este programa ha sido un tema importante en la lucha por los derechos de inmigrantes. Coloquialmente llamados ‘Dreamers’, aquellos que han cumplido con los rígidos parámetros de DACA, están sujetos a estrictos plazos dentro del programa que han cambiado con frecuencia debido a los numerosos ataques de la actual administración.

Casi inmediatamente después de asumir el cargo en 2017, la Administración Trump rescindió el programa. Desafiado en varios tribunales durante su presidencia, la supervivencia del programa fue incierta. En lugar de una decisión legal tomada por los tribunales con respecto al futuro del programa, dejaron de aceptarse nuevas solicitudes, pero a los solicitantes anteriores se les permitió volver a aplicar para el programa. En junio, la Corte Suprema falló 5-4 en contra de la interrupción del programa, citando las tácticas que utilizó la administración Trump para abolir el programa como ilegales, pero sostuvo que si se hacía legalmente, tenían derecho a cancelar el programa. Estos muchos cambios tenían a los Dreamers preocupados por los cambios en su estatus legal, mientras la batalla legal continuaba. Posteriormente, el 8 de diciembre, un tribunal federal de Nueva York ordenó la restauración del programa DACA a sus parámetros de la era Obama. 

Miles se manifestaron en San Francisco el 5 de septiembre a horas del anuncio hecho por el Abogado General, Jeff Sessions, sobre la suspensión del programa DACA. Los manifestantes iniciaron su marcha en el Edificio Federal hasta llegar al ayuntamiento. Foto: Drago Rentería

Esto viene con información nueva para los Dreamers actuales y solicitantes potenciales. En una presentación bilingüe en línea el 10 de diciembre, Catholic Charities y el Immigrant Legal Resource Center (ILRC) informaron sobre los requisitos para las solicitudes, así como los cambios e incertidumbres actuales del programa que, restaurado a sus parámetros desde su inicio en 2012, aún tiene como requisitos la antigüedad, la presencia en los EEUU, la educación y la buena moral. 

Para ser elegible, los solicitantes deben tener menos de 31 años al 15 de junio de 2012, haber migrado a este país antes de cumplir los 16 años y tener al menos 15 años al momento de presentar su solicitud. Además de la edad, los solicitantes deben demostrar que han seguido viviendo en los EEUU desde el 15 de junio de 2007 y haber estado físicamente el 15 de junio de 2012 cuando se anunció por primera vez el programa.

Los solicitantes pueden enviar esta información presentando registros escolares, arrendamientos, registros monetarios y otros documentos con su solicitud, que demuestren que han permanecido físicamente y residiendo en el país. Esto significa que todos los solicitantes deben tener aproximadamente un documento por mes o cada tres meses durante los últimos 13 años acreditando su residencia para cumplir con los requisitos de presencia física. 

Para los requisitos educativos, los solicitantes deben ser actualmente estudiantes, graduados, haber obtenido su GED, un certificado de finalización o haber sido dados de baja honorablemente como veteranos de la Guardia Costera o las Fuerzas Armadas. En términos de buena reputación moral, los solicitantes deben demostrar que no han sido condenados como adultos por un delito mayor, delitos menores importantes, más de tres delitos menores y que de otra manera no representan una amenaza para la seguridad nacional y la seguridad pública.

Conforme la administración de Biden asuma el cargo en 2021 con la promesa de mantener y posiblemente expandir DACA, persisten muchas luchas a enfrentar para el movimiento de Justicia para Inmigrantes. Si bien DACA otorga estatus legal temporal y autorización de trabajo, como programa no tiene caminos claros ni accesibles hacia la ciudadanía para los Dreamers, pues si se siguen los estrictos parámetros que definen lo que significa ser un Dreamer, los que están en el programa reciben seguridad temporal sin permanencia. 

Sin embargo, los Dreamers trabajan en los EEUU, reforzando su economía, obteniendo una educación superior y aportando a la economía con $5.7 mil millones en impuestos federales y $3.1 mil millones en impuestos locales y estatales en 2019. Si bien es importante, el programa DACA es solo uno de los muchos programas que deben crearse y ampliarse para proporcionar vías claras, accesibles y equitativas hacia la ciudadanía para los inmigrantes.