La comunidad se reunió en el Parque Potrero del Sol el 5 de septiembre para celebrar la vida de la leyenda musical Arcelio ‘Malo’ García, miembro fundador de la banda de rock latino, Malo.

La banda originaria de San Francisco saltó a la fama en la década de 1970 y ayudó a dar forma al movimiento del rock latino. El escenario al aire libre estaba iluminado por un sol brillante, lleno de músicos y decorado con fotos de García, quien falleció el 11 de agosto a los 74 años.

El memorial comenzó al mediodía con mensajes, oraciones y canciones de la familia y otros miembros de Victory Outreach San Francisco. Los miembros actuales y anteriores de Malo se turnaron para hacer declaraciones y tocar canciones favoritas como ‘Suavecito’, ‘Café’ y ‘Es un día encantador’. Las notas conmovedoras sonaron a través de la celebración inspiradora en el parque. Al pie del escenario, los fanáticos bailaron y tomaron fotos. En las secciones sombreadas, la gente levantó la mano y la voz en honor al querido ídolo del rock y miembro de la comunidad del Distrito de la Misión.

La hija de García y organizadora principal del evento conmemorativo, Yvette García Hernández, reflexionó sobre su padre. “Nuestra familia era una parte muy importante de la comunidad cuando se fundó Malo. Gracias a él, muchos de los talentos locales aquí pudieron comenzar”, dijo Hernández en una entrevista. “Era un camino que nunca quiso recorrer solo. Siempre quiso hacer esto con sus amigos, familia y comunidad”.

El papel de García en la comunidad se hizo eco durante todo el día. Richard Segovia grabó con García y es dueño de la ‘Casa del Rock Latino’, en las calles 25 y York, la cual presenta un mural de bandas de rock latino del Distrito de la Misión que han definido el género. “Arcelio era como el protector del Distrito de la Misión. Era como el embajador. Dejó una huella aquí”, reconoce Segovia.

El ex miembro de la banda Malo, el pastor Martín Cantú, también enfatizó el liderazgo de García: “Arcelio me tomó bajo su protección y me enseñó. Les daría a los músicos del Distrito de la Misión la oportunidad de estar en el escenario. Muchos de los músicos aquí presentes le deben gratitud”.

La familia se reunió para compartir historias y recuerdos, enfatizando que García era una leyenda del rock latino y mucho más. Quieren que la gente lo recuerde como un hombre de familia que siempre bromeaba. Fue un gran jugador de béisbol y boxeador; amable y humilde. Cuando sus parientes lo imaginan, lo ven no solo en el escenario, sino también en la cocina de la abuela mientras cocina.

“Solíamos caminar juntos por la calle y yo solía decirles a todos ‘¿quieres conocer a mi tío la estrella del rock?’ No le gustaba eso’’, recordó el sobrino de García, Pelé García, entre risas. “Pero siempre volvía con una broma. Amo a mi tío y lo voy a extrañar”.

Él todavía está con nosotros, comentó Raymond García, sobrino de García, porque “Él está en el corazón de todos. Puso un pedazo de su alma en todos”. Su familia estuvo de acuerdo en que García vive a través del talento que compartió con el mundo. Mientras su música se reproduzca, él no se irá.