Como si abrieran una carta visual dirigida a los funcionarios de inmigración, en la escena inicial de un breve documental, los detenidos en el centro Mesa Verde en Bakersfield, expresan preocupación por su salud y comparten cómo están conectados con el mundo exterior.

“Somos padres, hijos, hermanos, esposos o abuelos de ciudadanos estadounidenses”, comienza el documental ‘Coronavirus en los centros de detención de ICE’, firmado en voz de los detenidos.

Creado por la organización sin fines de lucro Define American, el documental es un llamado a los funcionarios para que permitan que estos hombres se pongan en cuarentena de manera segura en sus hogares mientras esperan audiencia, toda vez que el ambiente en el centro de detención no es seguro.

“Estas personas piden que se respete su humanidad. Su derecho a ser respetados”, dijo Deyci, de 24 años, asistente legal de inmigración en el Centro Legal de la Raza en Oakland, que representa a los detenidos en Mesa Verde, quienes solicitaron usar solo su nombre de pila.

Asif Qazi, de 31 años, un detenido actual en Mesa Verde, compartió que las expectativas de la instalación son que los detenidos practiquen la distancia social mientras comparten pequeños cuartos. “Están sucios [haciendo referencia al espacio habitable] e insalubre, con casos positivos de COVID-19 entre el personal y detenidos”.

Durante la entrevista con El Tecolote, Qazi mencionó que un oficial no portaba cubreboca y solo se la colocó cinco minutos antes de la entrevista. Mesa Verde declinó hacer comentarios.

Qazi participó en el documental porque sintió la necesidad de concienciar sobre lo que estaba sucediendo. Al igual que él, Shauna Siggelkow, de 31 años, jefa de contenido original de Define American, sintió que las historias que brotaban de ese centro de detención eran muy importantes pero no había mucha cobertura sobre el tema.

Un proyecto previo a la COVID-19 hubiera consistido en que Siggelkow se pusiera en contacto con el sujeto y configurara la idea del proyecto. Para este proyecto, ella hizo precisamente eso y luego lo entregó para un proceso creativo adicional a William Johnston-Carter, editor de video y gráficos en Define American. Johnston-Carter hizo las entrevistas y armó la pieza.

Pero ‘El coronavirus en los centros de detención de ICE’ difiere de otros proyectos. Con esta en pleno apogeo, no fue posible explorar lugares ni reunirse con personas, lo que realmente le permite a uno conocer el contexto. En el caso de este documental, todo se hizo de forma remota y el b-roll (material de archivo) se recopiló de otras fuentes.

Tanto Johnston-Carter como Siggelkow expresaron cómo el documental atraviesa tantos temas como la raza, la justicia penal y la inmigración. Debido a que se presentaría para una audiencia en línea, un video de 16 minutos parecía ideal, lo que limitaba la cantidad de información que podía incluirse.

“Ojalá pudiera haber enfatizado un poco más la organización local que está sucediendo en Bakersfield”, dijo Johnston-Carter. “Hay estos grupos realmente increíbles de gente local, existe este movimiento abolicionista juvenil actual y también la Alianza de Justicia Juvenil Inmigrante de California”.

El documental también crea una imagen clara de una línea de tiempo de la COVID-19. Descrito al estilo de cabeza parlante y con b-roll integrado por Siggelkow, las entrevistas les brindan esta sensación de autograbación, casi de cara. Una pieza que debe presentarse en festivales de cine.

La urgencia de completar el proyecto estaba en la mente de Siggelkow, sabiendo que era importante sacarlo a la luz más temprano que tarde. Sin embargo, ni ella ni Carter perdieron de vista la importancia del proyecto: siempre quisieron contar la historia de la mejor manera y lo más auténtica posible para el tema.

‘El coronavirus en los centros de detención de ICE’ se estrenó el 16 de julio de 2020. El 6 de agosto, el San Francisco Chronicle informó que el juez de distrito de los EEUU, Vince Chhabria, ordenó a todos en Mesa Verde realizarse la prueba del COVID-19. El 18 de agosto, el Bakersfield Californian informó que 54 de las 104 personas detenidas en ese centro dieron positivo al virus.

“Hay vidas en juego”, dijo Siggelkow. “Estos detenidos no necesitan estarlo. Todos podrían ser liberados ahora mismo”.