Ilustración Mike Reger

A Mónica le gustaba a su trabajo. Como mujer inmigrante recién llegada a los Estados Unidos ella sabía muy poco de Inglés, pero eso no le impidió obtener trabajo como recepcionista en un consultorio dental. Estaba muy orgullosa de ella misma y su capacidad de trabajar en un empleo que disfrutaba tanto, donde era muy apreciada por los clientes y en donde era tan buena trabajadora.

Mónica fue una de los primeras empleadas en su oficina en ser reconocida como la “Empleada Del Mes”, y su futuro se presentaba brillante en este nuevo emprendimiento. Sin embargo, todo cambió cuando quedó embarazada. Comenzó a notar cómo el dentista encargado de la oficina se mostraba resentido por la noticia de su embarazo En el pasado, este mismo dentista ya había compartido abiertamente su creencia de que las mujeres embarazadas y las madres en general eran malas empleadas. Por ejemplo, cuando Mónica pidió al mismo dentista que cerrara la puerta de la sala donde estaba la maquina de rayos x, para proteger a su hijo y prevenir los daños relacionados con la radiación, éste se burló de ella y se negó a su solicitud. Mónica se dio cuenta entonces de que estaba siendo tratada de manera discriminatoria. Tambien notó cómo otras compañeras de trabajo estaban siendo tratadas de la misma manera al descubrirse su embarazo.

Y muy pronto fue el turno de Mónica. Menos de dos semanas después de anunciar su embarazo, el mismo dentista le informó que la empresa ya no la necesitaba.

Al principio, Mónica no supo qué hacer. Embarazada y sin trabajo, sintió que había sido víctima de discriminación por parte del consultorio dental para el que con tanto gusto había trabajado. Pero ella desconocía sus derechos y no sabía dónde encontrar ayuda para su caso. Igual que muchas mujeres que han sido discriminadas, Mónica llamó a la línea confidencial de asesoría y consejería legal gratuita de Los Defensores de los Derechos Iguales (Equal Rights Advocates – ERA) 1 (800) 839-4372). ERA es una organización sin fines de lucro, enfocanda en la protección y la garantización de la igualdad de los derechos y las oportunidades para las mujeres y niñas. ERA tiene una campaña de Trabajo y Familia que se centra en la defensa de los derechos de las mujeres embarazadas y los hombres y mujeres como fuerza de trabajo.

Cuando Mónica llamó, las abogadas de ERA le proporcionaron la información legal sobre sus derechos. Por ejemplo, Mónica se enteró de que ambas leyes, tanto federales como estatales, protegen a las mujeres que han sido discriminadas por embarazo. También se supo que en California su empleador está obligado por ley a dar cabida a su embarazo. Por ejemplo, cuando Mónica le pidió al dentista que manejaba el consultorio dental en el que trabajaba que cerrara la puerta de rayos X, lo menos que éste tendría que haber hecho hubiera sido hablar con ella sobre una reacomodación para evitar los posibles daños a ella y a su bebe. Se enteró también de que la discriminación por embarazo puede incluir todas las siguientes acciones por parte de un empleador: negarse a contratar a una solicitante embarazada; despedir o degradar a una empleada embarazada; negar el mismo puesto o uno parecido a una empleada embarazada luego de que ella regrese de una licencia relacionada con este embarazo; tratar a una trabajadora embarazada de forma diferente a otros empleados temporalmente discapacitados. Por último, también se enteró acerca de su elegibilidad para tomar licencia con la protección de su puesto mientras estuviera ausente de éste.

Pero, más importante aún, es que Mónica se comunicó con ERA y encontró el apoyo necesario, se enteró de que ERA ayuda a los trabajadores mediante la negociación con sus empleadores, que provee de información sobre acciones legales contra ellos y que, a veces, ayuda también a los trabajadores a través de la denuncia de las acciones del empleador ante los organismos estatales como el Departamento de Empleo y Vivienda Justa (DFEH), las agencias federales (la Equal Employment Opportunity Commission (EEOC)), y en los tribunales estatales y federales.

Desgraciadamente, Mónica no es la única mujer que trabajó en un consultorio dental que ha sido discriminada por embarazo. Mónica conoce otras mujeres que también han sido discriminadas por los mismos motivos que ella, y ERA está trabajando duro con ellas para ayudarlas a proteger sus derechos. Incluso si las mujeres no deciden presentar una queja o una demanda, ERA todavía puede ayudar a proporcionar información para que las mujeres puedan saber cuáles son sus derechos.

Si usted trabaja para un consultorio dental o sabe de alguien que ha trabajado para un consultorio dental que ha sido discriminado por el embarazo, por favor póngase en contacto con efectividad en (800) 839-4372 para obtener más información.

Jora Trang es abogada en Equal Rights Advocates

El verdadero nombre de Mónica y algunas de las circunstancias de su historia han sido cambiadas para proteger su identidad.