Courtesy of Freedom Archives

La historia se rehace constantemente en el 522 de la calle Valencia, residencia de los Archivos de la Libertad. Aquí es donde las fuentes originales de algunos de los movimientos sociales, políticos y culturales más visionarios permanecen guardados para el acceso de activistas y artistas.

Los archivos, tienen más de 10.000 horas de grabaciones de audio y video que documentan los movimientos por la justicia social locales, nacionales e internacionales desde los años 60 hasta el presente. “Los Archivos de la Libertad proporcionan un recurso con raíces en la comunidad, donde las historias, pueden ser restauradas y revisadas por las comunidades,” dijo Claude Marks, Director de los Archivos de la Libertad.

Los Archivos de la Libertad, muestran discursos de lideres de movimientos y activistas de la comunidad, protestas y manifestaciones, poesía y música. El material abarca Los Derechos Civiles, estudiantes, antibelicistas, cárcel, movimientos de mujeres y los movimientos de lesbianas y gays, así como una considerable Colección de la Raza. Algunos de los individuos que pueden ser explorados a través de los archivos incluyen a Malcolm X, Paul Robeson, Abbie Hoffman, Assata Shakur y Lolita Lebrón entre otros.

Los archivos están concebidos, como una medida contra los archivos de las universidades, que son difíciles para la gente que no está en el proceso de graduarse para accederlos. “Las historias de varias comunidades como la Misión y lo que queda de Fillmore, tienen a traves del archivo, una manera de conectar dichas comunidades con su pasado, particularmente un pasado conectado a una visión de un mundo justo,” dijo Marks. La gente interesada en utilizar los archivos, puede buscar el catálogo entero en la web. Los archivos están disponibles para cualquiera que intente usar su experiencia para potenciar de cara al público lo que encuentre.

Los archivos los han usado personas que hacen documentales y maestros, así como artistas del espectáculo. No hay una tarifa establecida para usar los archivos; el proyecto funciona con gente de manera individual. “No esta destinado para coleccionistas sino para las personas que lo divulgan,” dijo Marks. “Es una visión de alto prestigio, donde la gente que quiera usarlo para incrementar el impacto (del material) puede utilizarlo.”

Los orígenes de los Archivos de la Libertad se retrotraen a casi 40 años, cuando los productores de radio independiente comenzaron a coleccionar las cintas de las entrevistas y actuaciones. Se comenzaron a suceder de esta forma, reuniones entre los miembros del Departamento del Tercer Mundo, el Colectivo de Programadores Negros y Comunicación Aztlán.

Muchos de estos productores trabajaron a través de Radio Pacífica; pero la estación no estaba interesada en archivar su material. Los productores individuales guardaron sus propias grabaciones y hace 12 años comenzaron a reunirse nuevamente entre ellos, ahí fue que Marks se organizo para ver la forma de presentar las grabaciones y hacer que estuvieran disponibles para la difusión pública. Asi se dio el nacimiento de los Archivos de la Libertad.

Además de las grabaciones de audio, los archivos han compilado metraje de video que ellos han usado, junto con grabaciones de sonido, para presentar historias documentales que tratan de educar al público sobre el poder de la organización social y la lucha contra la opresión del sistema.

El más reciente ejemplo de su trabajo fue el documental, COINTELPRO 101, que se estrenó en el Centro Cultural de arte latino de la Misión, El documental explora la historia de los movimientos de lucha por la liberacion de los negros, el movimiento Chicano, nativo americano y el movimiento independentista puertoriqueño. Estas agrupaciones ocurrieron en el transcurso de los finales de los años 60 y principios de los 70 y tambien muestra el documental, cómo la represión gubernamental estuvo en la base de las disoluciones de estos movimientos. .

Marks dijo que mucho del material que se demanda, se centra en la historia del encarcelamiento y las luchas carcelarias. Estas demandas encajan con proyectos mayores, que buscan conectar el clima de la actual represión política, con la historia de los gobiernos de los EEUU y la aplicación de la ley contra los organizadores de movimientos.

Teniendo esto presente, se hizo público y se exhibio COINTELPRO 101. “Lo estamos llevando por diferentes lugares y hemos lanzado el DVD con la esperanza de que incrementará el nivel de activismo sobre los prisioneros políticos actuales y la historia del encarcelamiento,” dijo Marks.

Uno de los objetivos de los archivos es trabajar con gente para desarrollar un curriculum, sobre la historia de los movimientos y los activistas. COINTELPRO 101 ha sido usado recientemente en escuelas secundarias públicas en Los Altos; asi como tambien, se ha estrenado recientemente una versión subtitulada en español en un campus de una universidad de Puerto Rico.

La mayoría de los archivos incluyen actuaciones culturales, que se centran en lo local. Otro proyecto en el que están trabajando los archivos es un libro y CD titulado “Outspoken Roots’ que refleja la poesía que se produjo en el Distrito de la Misión en los setentas. Los temas que esta colección explora, incluyen el golpe en Chile y otras luchas de Centro y Latinoamérica en el barrio. Los archivos también sirven como fuente de información y crecimiento cultural de la escena musical del Distrito de la Misión conectada con la diáspora de Centro y Latinoamérica.

Marks espera obtener financiación para una compilación de los conciertos musicales del Encuentro anual, patrocinados por El Tecolote; un esfuerzo que representa más de 20 años de actuaciones musicales en la Misión.

Un centro comunitario está preparado para abrir en el edificio que alberga los Archivos de la Libertad dentro de unos pocos meses. Los planes están en marcha para colaborar con la East Side Arts Alliance para tener actividades públicas. “Queremos ser una parte vibrante de una comunidad,” dijo Marks.

Para más información sobre los Archivos de la Libertad, ir a www.freedomarchives.org.

—Traducción Emilio Ramón