David Campos, Supervisor en la alcaldía de San Francisco por el Distrito 9, declaró oficialmente el pasado 9 de febrero que buscará ser reelegido para otro mandato en la Junta de Supervisores durante una actividad en el local Blue Macaw.
Hasta la fecha no hay ningún otro candidato para retar a Campos y ninguno de los supervisores titulares ha sido forzado a salirse por votación desde que se adoptara el voto por preferencia el año 2008.
Campos, inmigrante guatemalteco que vino de niño a los EEUU, ha abogado por el derecho a un procedimiento legal justo entre jóvenes inmigrantes y trabajadores sin documentos. Su labor fue clave en la aprobación de leyes municipales que incrementaron la responsabilidad de los patrones y reforzó la política de Ciudad Santuario de San Francisco.
“Lo que hemos hecho en el Distrito 9 durante estos pasados cuatro años desde esta oficina es sencillamente atenernos al mantra de que para que el gobierno funcione tiene que hacerlo para todo el mundo”, declaró Campos. “El gobierno tiene que atender desde al más rico hasta el más pobre … a todas y cada una de las personas que llaman hogar a San Francisco.”
A Campos se lo considera líder del segmento progresista de la junta, pero se ha aliado también con personas de otras ideologías, haciendo llegar su mensaje a dueños de pequeños negocios, además de su base progresista y latina.
“Apoyamos a nuestros pequeños negocios”, declaró. “Pero también deberían tratar bien a sus trabajadores, y estamos orgullosos de que la mayoría de nuestros negocios lo hacen.”
Campos también destacó su participación en la redacción de la ley que estableció una ordenanza en el seno del Departamento de Policía de San Francisco que, declaró, “obliga a los oficiales de policía a estar conectados con la comunidad … Es la primera vez que en una ciudad grande se ha hecho algo así”.
—Traducción Iñaki Fdez. de Retana