El grupo teatral infantil La Colmenita ofreció una actuación llena de energía en el Teatro Cowell en Fort Mason el pasado 29 de octubre. Photo Mabel Jiménez

San Francisco pudo vislumbrar las relaciones culturales entre Estados Unidos y Cuba -relaciones que, según algunos, se están descongelando- cuando el grupo teatral de niños cubanos La Colmenita, reconocido mundialmente, se presentó en Fort Mason Center, el 7 de octubre.

La Fundación Brownstone y el Comité Internacional para la Liberación de los Cinco Cubanos, coordinaron esta gira de La Colmenita, la segunda que el grupo hace por los Estados Unidos desde el 2003. El grupo hizo una presentación privada en las Naciones Unidas y se presentó en varios lugares de Washington, Nueva York y San Francisco.

La Colmenita ha sido reconocida por El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia por su promoción de los derechos de los niños y los miembros del grupo fueron reconocidos como Embajadores de Buena Voluntad en el 2007, de manera que no eran solamente los fanáticos de teatro quienes estaban emocionados de ver su nuevo show “Abracadabra”.

Tras haber perdido a su padre en el ataque terrorista del vuelo 455 de Cubana de Aviación, el director, Carlos “Tin” Alberto Cremata, encontró la inspiración para formar el grupo. El grupo empezó a trabajar en 1990 como un proyecto experimental. Desde entonces, ha crecido para acoger una cantidad diversa de niños a lo largo y ancho de Cuba y Latino América.

“El objetivo de esta obra era conocer al ser humano que está detrás de la palabra “héroe””, dijo Cremata. “Los niños de La Colmenita usaron este concepto y lo aplicaron a los héroes modernos de Cuba; los Cinco Cubanos”.

La obra toma lugar en un colegio en el que han contratado a un profesor nuevo. Fue en este aula donde los niños compartieron sus clases sobre los Cinco Cubanos, presentándolos como héroes cubanos que se enfrentaron al terrorismo y merecen ser liberados de sus sentencias injustas en los Estados Unidos.

Los mensajes políticos fueron pesados, pero fueron acompañados por transiciones frecuentes a la “clase de música” donde los niños iluminaron al público con su energía cariñosa y contagiosa mientras interpretaban clásicos de la música cubana como Los Van Van, Adalberto Álvarez, Silvio Rodríguez e incluso una canción de Bob Dylan.
La obra misma, sin embargo, se enfocó más en presentar a los Cinco Cubanos como héroes y en insistir en la importancia de su liberación.

Roberto López, de trece años, quien interpreta el protagonista del show, dice que su ilusión es que la obra pueda ayudar a acercar a Cuba y a los Estados Unidos.

“Mi deseo sería que no hubiera más problemas políticos”, dijo. “Ahora que toda la gente de América y el mundo está de acuerdo en que lo que quieren los seres humanos es poder compartir cultura y conocer personas diferentes. Eso es lo que queremos nosotros, conocer personas diferentes, incluso en los Estados Unidos”.

—Traducción Mónica Cuéllar