Vista panorámica desde la catedral de Granada, Nicaragua. Photo Hanna Quevedo

“Mi Barrio Latino América” consiste en una serie de artículos biográficos breves sobre personas que Ramón Hernández y Karol Carranza están entrevistando en sus viajes por América Central y México. Los artículos realzan las historias personales, preocupaciones, opiniones y temas en las propias palabras de la gente entrevistada.

Mariana Zeledón Navarro & Claudia C. Sevilla Navarro, Granada, Nicaragua, March 2011.

Mariana y su hermana Claudia han sido vendedoras de comida en el Parque Central de Granada desde hace ya 19 años. Una fuente vital de ingresos económicos para muchos nicaragüenses, hablan del intento violento de sacarlos de la plaza a finales de los años 1990, y continúan hablando sobre la lucha con las deudas, los muchos impuestos y la corrupción, lo que les hace difícil conseguir sus necesidades básicas. Nicaragua tendrá elecciones presidenciales en noviembre de este año dando sus opiniones al respecto.

“Todos los días pagamos para estar aquí, así que dependemos mucho de los préstamos que hacemos a diario para cubrir nuestros gastos diarios. Tener este puesto requiere pagar una cuota mensual al gobierno municipal para poder usar este espacio, la basura: bueno, es un impuesto aquí. Aparte de pagarle a la alcaldía, también le pagamos a la persona que nos ayuda a guardar nuestras carretas, a la persona que las ubica, y la persona que nos presta el dinero para nuestros gastos diarios. Cada día pagamos, a excepción de la municipalidad, lo cual se debe mensualmente.”

“Estos pagos siguen creciendo. Antes no teníamos que pagar nada. Los pagos comenzaron hace unos diez años. Tatiana Chamorro fue la alcaldesa de Granada que inició estos pagas mensuales y luego los suspendió. Ella lo hizo porque quería eliminar a los vendedores del Parque Central, pero cuando vio que no lo podía lograr con el cobro de estos altos cobros, los suspendió para poder sacarnos diciendo que no pagábamos. Nos organizamos y protestamos y así fue cuando nos comenzaron a maltratar. En mi caso (Claudia) yo aborté porque la policía me pegó causándome que perdiera mi bebé. Sin embargo, al final ganamos la lucha porque los vendedores nos quedamos. Ella perdió porque la gente de Granada apoyó nuestra lucha. Allí fue cuando los pagos comenzaron de nuevo; suspendiéndolos, como explicábamos, les daba la excusa para sacar a los vendedores, porque si pagamos tenemos derecho de quedarnos. Eso pasó en 1996, desde entonces los pagos siguen incrementándose: nunca podés pagarlos completamente.”

“Reducir estos impuestos nos beneficiaría. Para que Nicaragua progrese, deben parar de cobrarnos a los pobres y cobrarles a los que pueden pagar, pero exoneran a las grandes empresas que pertenecen a las familias más ricas de tener que pagar impuestos. Desde los años de los 1970 y 1980, Nicaragua tuvo muchas guerras y muchas madres perdieron muchos hijos. La gente votó por Violeta Chamorro porque eliminar el servicio militar obligatorio fue una de las promesas principales de su campaña. No queríamos más guerras y es bueno que desde entonces ahora vivimos en paz. Hace cinco años cuando la gente votó por el actual presidente (Daniel Ortega), sus detractores dijeron que él iba a poner el servicio militar y continuar la guerra, pero solo eran opiniones de la derecha. Los políticos neo-liberales argumentaron esto, pero si conoces un poco de la historia de Nicaragua, sabrías cuánto dinero se robaron de nuestro país. Nicaragua no es como parece y la historia verdadera nunca se enseña, pero nosotras hemos vivido esta historia. La gente votará por aquellos que trabajan para el pueblo y por lo que vemos, los liberales sólo trabajan para ellos mismos.”

—Traducción Anuar Murrar-Garay