Juan Felipe Herrera, Poeta Laureado de California.

El nuevo poeta laureado de California Juan Felipe Herrera, espera servir como inspiración y enlace literario para todos quienes viven en California.

Recibió el honor por parte del gobernador Jerry Brown en marzo y espera su confirmación por el senado en junio.

“Estaba manejando hacia el trabajo el 22 de marzo cuando timbró el teléfono y me dije ‘será mejor contestar’ porque era de Sacramento”, dijo Herrera. “Hice lo mejor que pude, porque venía manejando, y me dijeron ‘felicidades has sido nombrado el poeta laureado de California.’”

“Todavía falta que me confirme el senado, así que estoy prendiendo mis velitas para que todo salga bien”, agregó.

Por 97 años, California honró voces poéticas ejemplares extraoficialmente y retenían el titulo por el resto de su vida. El período se limitó a dos años y la posición se hizo oficial en el 2001 por Gray Davis, el entonces gobernador de California.

Herrera dijo que ser nominado fue “una sensación ondulada.”

“Me siento fabuloso”, el dijo. “Es un gran honor, pero ahora tengo una nueva serie de responsabilidades.”

Hay varios proyectos en los que está trabajando como parte de su nuevo puesto.

“Lo quiero mantener simple”, el dijo. “Al principio tenía como 20 cosas que quería invitar a la gente a que las hicieran.”

Herrera espera lanzar una página web en Agosto 2012, que servirá de anfitriona a “el poema sobre la unidad más grande e increíble del mundo.”

Espera poder configurarlo para que cualquier persona pueda entrar a la página y le agregue una estrofa durante su término de dos años; él invita a todos, de cualquier cultura y en el lenguaje que sea, a que compartan sus ideas sobre la unidad.

Otro proyecto, “I Promise Joanna/te prometo Joanna a parar la intimidación” será dedicado a Joanna Ramos, una niña de diez años quien murió en Long Beach el pasado febrero a consecuencia de lesiones que recibió en una pelea después de la escuela.

Vida Personal
Nacido en Fowler, California, Herrera fue el único hijo de una familia de campesinos emigrantes y creció principalmente solo, con sus padres mudándose de pueblo en pueblo.
Con mucho tiempo libre en su niñez, él recuerda su imaginación vívida y como eso le condujo a sus intereses en maneras de ejercer expresión libre.

“Crecí siendo muy intenso y excitable. Mi madre y yo siempre hablábamos y me contaba historias de su vida,” él dijo. “Ella siempre me decía ‘yo pase por esto’ así que me convertí como un experto escuchador, un escuchador muy intenso.”

El siempre fue atraído a portavoces públicos y presentadores y deseaba expresarse así pero tenía temor. Así que contra su propio recelo, se forzó a participar en un coro para facilitarse en hablar—sin pensar en que tendría que subir a un escenario a presentar.

Herrera formó parte de un renacimiento Chicano de poesía y arte, del cual formó parte desde la secundaria y durante sus estudios universitarios.

A fines de los ‘70s, mientras estudiaba en la Universidad de Stanford, Herrera y sus colegas se mudaron a San Francisco para “conquistar la ciudad” como poetas Chicanos.

Entre tantos logros, Herrera estuvo involucrado en la creación de suplementos literarios para varios periódicos, particularmente “El Tecolote Literario” de El Tecolote.