Agentes federales intensificaron el uso de la fuerza la mañana del miércoles 20 de agosto en San Francisco, cuando una treintena de manifestantes se enfrentaron a agentes del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) y de Operaciones de Deportación y Control (ERO, también por sus siglas en inglés). La confrontación, que tuvo lugar frente al tribunal de migración, ocurrió tras las presuntas detenciones de personas justo después de haber salido de sus audiencias.
Aunque testigos en el lugar reportaron inicialmente la detención de hasta nueve personas, la Red de Respuesta Rápida de San Francisco solo confirmó un arresto el cual ocurrió en el número 100 de la calle Montgomery, alrededor de las 9:30 de la mañana, al entrar o salir de la audiencia de migración.
Más tarde, en el 630 de la calle Sansome, un segundo arresto tuvo lugar. Según testigos, agentes de migración maniataron a un manifestante que sostenía un megáfono y lo llevaron al interior de la oficina local del ICE. El DHS no ha confirmado la identidad de las personas detenidas.

Aunque no se han realizado redadas masivas en San Francisco, los agentes del ICE han llevado a cabo arrestos selectivos de migrantes, incluyendo familias con infantes, durante citas rutinarias al tribunal, mientras que a otras personas se les detuvo en los pasillos de los tribunales tras concluir sus audiencias. Una investigación del San Francisco Chronicle reveló que esos arrestos en el norte de California aumentaron un 123% este año en comparación con los últimos siete meses de la administración Biden, lo que refleja una escalada a nivel nacional.
Durante meses, activistas por los derechos de las personas migrantes han organizado plantones frente al tribunal de la calle Montgomery, bloqueando el acceso y, en ocasiones, causando la suspensión de las audiencias. Este miércoles se encontraban en su lugar habitual, afuera del edificio, cuando se acercaron varios vehículos no identificados del DHS. Con carteles que decían «¡Bloqueen al ICE!» y coreando «¡ICE fuera de la Bahía!», las personas manifestantes se movilizaron para bloquear, con sus cuerpos o sus bicicletas, la intersección de las calles Montgomery y Sutter.

Tyler Morris, fotógrafo independiente que trabajó anteriormente con El Tecolote, describió haber visto un convoy de vehículos de dicho departamento estacionado frente al juzgado durante el enfrentamiento entre agentes y manifestantes. «Un agente del DHS sacó su macana, dirigiéndose a la cara de un manifestante, y ese fue el punto de inflexión… la situación se descontroló», relató Morris.
Lo que empezó como un intercambio verbal se transformó en violencia cuando los agentes usaron gas pimienta y blandieron sus macanas. Uno de los agentes incluso roció accidentalmente a un compañero. La situación escaló rápidamente cuando más agentes del DHS llegaron con equipo táctico, armados con pistolas y munición no letal. Dispararon balas de pimienta y de goma, dejando a algunos manifestantes retorciéndose de dolor mientras otros se desplomaban en el suelo.
Tras despejar la intersección, la caravana de agentes de esa agencia federal giró en sentido contrario hacia la calle Sutter, donde otro grupo de manifestantes les bloqueó el paso hacia la calle Sansome. Testigos afirmaron que los agentes golpearon a un manifestante en el pecho mientras otros usaban una camioneta para apartarlos a empujones.
Finalmente, vehículos del DHS llegaron a la oficina local del ICE en el 630 de la calle Sansome, escoltados por una hilera de agentes que avanzaba por la calle. Personas manifestantes los siguieron, gritando «¡Qué vergüenza!» y recriminándoles. Antes de realizarse el segundo arresto, varios manifestantes más fueron rociados con gas pimienta y alcanzados por balas de goma a corta distancia.

Morris señaló la presencia de médicos acompañando a las personas manifestantes quienes atendieron rápidamente a las personas heridas por balas de goma y gas pimienta. Hasta donde él sabe, ninguna sufrió lesiones que pusieran en peligro su vida, aunque se desconoce el estado del manifestante arrestado.
El Departamento de Policía de San Francisco no se encontraba en el lugar. Un portavoz confirmó posteriormente que este departamento «no tuvo nada que ver con los sucesos».
Para la comunidad migrante de San Francisco, este enfrentamiento es otro recordatorio de que la imposición de la ley no sólo está aumentando, sino que también se está volviendo más agresiva. A principios de este mes, agentes del ICE derribaron y arrestaron a dos personas manifestantes frente a la oficina de la calle Sansome, quienes fueron liberadas ese mismo día.

El altercado del miércoles marca la más reciente de una serie de escaladas. El 8 de junio, agentes del ICE rociaron con gas pimienta a manifestantes que intentaban impedir la detención de un migrante en el número 100 de la calle Montgomery; el uso de gas pimienta y otras armas no ha hecho más que aumentar desde entonces.
California no es el único estado que ha experimentado un aumento en esas tácticas. A nivel nacional, varios informes y videos muestran al DHS usando métodos más contundentes contra manifestantes. La semana pasada, un video muy difundido mostró a los agentes sacando a rastras a la colombiana Tatiana Martínez de su coche durante un arresto.