El 20 de junio, se llevó a cabo por primera vez e íntegramente en español el concurso anual Miss y Mister Safe Latino, con el objetivo de continuar informando y celebrando a la comunidad LGBTQ+ latinx.
Como es tradicional, los concursantes compitieron en tres categorías: Mister, Miss y Miss Transgénero (TG). El objetivo del concurso es crear conciencia sobre la continua discriminación contra la comunidad LGBTQ+, fuera y dentro de la comunidad latinx, e informar a las personas sobre el SIDA y otros riesgos y sobre prevención para la salud.
El ganador de la categoría Mister, Esteban Cuaya-Muñoz, refirió la relevancia del evento al ser una plataforma para compartir la voz y la apariencia física para mostrarle a la gente que «existimos, todavía estamos aquí».
«Si quieres participar, solo hazlo, regístrate», dijo Cuaya-Muñoz. «Definitivamente es una experiencia, especialmente si tienes un mensaje qué compartir. En la comunidad de habla hispana, ya tenemos muchas etiquetas que tenemos que navegar y el simple hecho de poder aceptar quiénes somos nos permite sentirnos libres».
Para la ganadora de la categoría Miss TG, Elly Maldonado, enviar un mensaje y seguir luchando por la igualdad fue su misión al participar: «Este concurso es perfecto para poder educarnos no solo a las personas cisgénero si no también a nuestra comunidad. Nosotros como comunidad no estamos exentos de no tener buena educación,» Maldonado dijo. «Hay mucha información en las redes, pero a veces no está correcta».
Maldonado es una mujer transgénero de 43 años que llegó de México a los 26 años. Comenzó su transición a la edad de 14 años y dijo que la discriminación ha existido y continúa sin importar en qué parte del mundo se encuentre: «Cuando vas a aplicar por un trabajo, te ven como mujer transgénero y luego te ven que eres latina, okay y no hablas bien el inglés. Entonces es como que tres veces más difícil para nosotras. Pues eso es lo que estamos acostumbrados entonces seguimos luchando,» Maldonado dijo.
Para ella, siempre ha sido una lucha, ya que no recibió ningún apoyo de su familia mientras crecía. Para ella es una pasión hablar e informar a otros sobre sentirse incluidos en la sociedad.
Por su parte, Karla James, ganadora de la categoría Miss, comparte un sentimiento similar y aunque recibió el apoyo de su madre, ha visto las dificultades de amigas y otras que no. Y ella también se enfrenta a la discriminación todos los días y quiere que la gente se informe: «La gente siempre juzga solo por lo que ve, pero nunca habla, ni llega a conocer a esa persona y creo que cada uno de los que participamos dejó un hermoso mensaje que toca el corazón de las personas. Creo que si cada persona marca la diferencia, entonces todo será mejor en la comunidad».
Maldonado cree que el concurso va mucho más allá de una corona y vestir hermosos atuendos. Si bien ese es el tema, se anima a los futuros participantes a contribuir con la sociedad enviando a los espectadores un mensaje que deje huella para siempre.
«Vayan preparados para dejar un tema que deje un mensaje a la comunidad, no solo se trata de lentejuelas o plumas este evento se trata más que nada de aportar algo a la comunidad, no solo de verse bonita y portar una corona en el desfile eso es bonito y te motiva mucho pero no es la principal razón», Maldonado dijo.
Cuaya-Muñoz dijo que aún queda mucho trabajo por hacer incluso en San Francisco, y mucho menos en toda el Área de la Bahía y más allá: «Como alguien que experimentó un crimen de odio de primera mano en San Francisco, hay mucho trabajo por hacer», dijeron. «No solo depende de nosotros, sino también de nuestros cómplices heterosexuales cisgénero intervenir y protegernos tanto como nosotros los protegemos a ellos. Hablamos de brutalidad policial, inmigración, violencia armada, estamos en las calles exigiendo y luchando por los derechos de todos, no solo de las personas LGBTQ, sino de todos los demás, y es un llamado a hacer lo mismo por nosotros».
