Barrio por barrio es difícil decir cual es el más atractivo de San Francisco, porque si de algo se destaca la ciudad, es por su elegante arquitectura desde la bahía hasta el mar. Barrios como Telegraph Hill, Nob Hill o North Beach han sido promovidos gracias a intensos planes mantenimiento y de marketing, impulsados por sus correspondientes distritos y asociaciones de vecinos.

Ahora es el turno de la zona baja de la calle 24 (conocida en inglés como ‘Lower 24th Street”). Para tales efectos, el pasado 24 de febrero se realizó en la iglesia San Pedro (Saint Peter’s), un encuentro donde se dieron a conocer varias medidas que se tomarán para mejorar el barrio.

La reunión fue organizada por David Campos, supervisor del distrito 9, conjuntamente con la Oficina de Desarrollo Económico y Mano de Obra (OEWD por sus siglas en inglés) y la Corporación para la Iniciativa de Soporte Local del Área de la Bahía (LISC por sus siglas en inglés). En la reunión se expuso el resultado de lo que fue el estudio y análisis socio-económico de la zona realizado durante el año 2010 por la OEWD, conjuntamente con vecinos y dueños de negocios.

“La zona baja de la calle 24 es como una esmeralda en bruto”, declaró Jordan Klein, vocero de la OEWD, “es tanto el amor que le tienen sus vecinos a la zona de la calle 24, que no han querido que se toque en todo este tiempo, sin cambiar, con sus casas victorianas y grandes árboles, que cubren el cielo con su follaje tupido dándole un aspecto de otro tiempo.”

Conforme a varios asistentes a la reunión, hay un trabajo a realizar para que su belleza no pase a ser confundida con descuido. Muchos faroles han sido cubiertos por las hojas de los árboles, quedando cuadras enteras casi en la oscuridad. Por lo que se estableció un plan para podar, clasificar y plantar nuevos árboles. Así mismo, se plantea diseñar “un sistema de alumbrado que resalte la arquitectura de las casas y que a la vez dé más seguridad al peatón”. La seguridad del barrio fue uno de los puntos más destacados en la reunión y se acordó que conjuntamente con la policía se establecería un programa de patrullaje más intenso de la zona.

Hetal Patel, gestora del teatro Brava en la calle 24, expuso varios puntos referentes a los comercios de la zona. Entre ellos destacó el vencimiento de muchos contratos de arrendamiento de los negocios de la calle 24. Varios propietarios, sin previo aviso, están exigiendo el triple de alquiler para renovar el contrato, con lo que los dueños de los negocios se ven obligados a cerrar las puertas, luego de haber invertido todo una vida en el barrio.

Para controlar estos incrementos en el alquiler de los locales, se presentó la idea de crear una lista con los vencimientos de contratos de arrendamientos de cada comercio, para que los dueños de los negocios puedan negociar con tiempo la renovación del mismo y unirse para presionar a los propietarios.

Así mismo, los asistentes expresaron interés en involucrar a los propietarios de los inmuebles en este proceso de cambio, haciéndoles entender que ellos también serán beneficiados por las mejoras en el barrio, porque al revalorizarse la zona en un futuro, ellos podrían subir el precio de los alquileres. Y le estarían dando tiempo también a los arrendatarios a prepararse para ese momento.

Otra iniciativa manifestada por Patel fue la de establecer comunicación entre los diferentes negocios del área, para que así funcionen de manera conjunta y no individualmente. La idea propuesta consistiría en que si un negocio tiene una actividad, el resto esté al tanto y preparado para ofrecerle servicios a esos clientes. Por ejemplo si hay una exhibición de arte que va a atraer a 200 personas al local, se propuso que los restaurantes y bares ofrezcan descuentos, y que las taquerías, tiendas de ropa y demás negocios estén conectados para que mediante ofertas y rebajas, toda esa gente sea atendida como merece y gasten su dinero en el barrio.

Por otra parte se buscaría atraer mas visitantes a la zona, promocionándola en los organismos de turismo de la ciudad e incluyéndola en los mapas de guías turísticos. Según Klein, encargado del proyecto, no se van a hacer cambios profundos ya que quieren mantener el carácter de la zona, ni tampoco se busca atraer a grandes corporaciones, sino que consiste en un esfuerzo para poner a la zona de la calle 24 en el mapa y hacer que la gente disfrute caminando por el barrio sin más. Klein expresó que iban a tener cuidado de no sobreexponer comercialmente el barrio para que sea carnada de las grandes corporaciones.

La reunión finalizó con el compromiso de crear una comisión para la organización de actividades a nivel de barrio, donde todas las partes interesadas estén involucradas, y con la posibilidad de cerrar al tráfico la calle 24 los domingos como la alcaldía ya ha hecho en el pasado. Klein explicó cómo ya han conseguido $35,000 para costear todas estas operaciones, aunque recalcó que el esfuerzo principal provino de los interesados y voluntarios del barrio, que han sido de una invalorable ayuda durante todo el año pasado para realizar el estudio, y que también esperan que estén presentes a la hora de ejecutar el proyecto.