Kyle McDonald, de 10 años de edad, confiesa: “No puedo ser feliz sin la música”. Foto Estéfani Méndez

La música es indispensable para una vida feliz y un medio eficaz para expresar los sentimientos, según varios expertos en la materia.

La musicóloga y experta en el manejo del violín, Stephanie Chang, quien dirige el centro de instrucción musical ‘Music Corner’ ubicado en Danville, condado de Contra Costa, declara que “un niño necesita ser capacitado con elementos musicales lo más pronto posible en el desarrollo de su infancia, al igual que va aprendiendo a leer y escribir”.

Chang, quien formó parte de las orquestas sinfónicas de Vacaville y Vallejo, señala cómo “los niños pueden explorar el mundo del lenguaje de los sonidos, que no tiene ni fronteras ni límites”.

Las oportunidades de instrucción musical para jóvenes y adultos durante los meses de ocio y asueto del verano son muchas. El Centro Comunitario de Música, que desde 1921 educa musicalmente a la comunidad de la Misión, “capacita en más de 30 instrumentos de viento y de cuerdas”, declara Sonia Tvedp, directora de mercadotecnia del centro quien además informa que el año pasado adiestraron a más de 2.400 personas.

“[Tenemos] un grupo folclórico especialista en la interpretación de melodías suramericanas, música banda, un grupo de jazz y varios coros”, dice Tvedp. Al referirse a las variadas edades que coexisten en el centro, matiza cómo “existe una gran cordialidad entre todos”.

El niño de diez años Kyle MacDonald Méndez, diestro en el piano, violín, trompeta, saxofón, y clarinete quien actualmente forma parte del coro de Piedmont, declaró: “Para mí la música es algo muy grande, es mi vida. El primer instrumento que aprendí fue el piano, cuando tenía 4 años”. Concluyó diciendo cómo “mediante la música se puede hablar o relatar una historia, una experiencia o un sentimiento”.

“Con todo el empuje de la tecnología y los videojuegos los niños carecen de sensibilidad para explorar la belleza natural que nos rodea”, dice Chang quien luego concluye afirmando que: “Niños sin formación artística están desprovistos de imaginación y la sensibilidad se convierte dentro de lo cotidiano en una mera existencia”.

El Centro Comunitario de Música está ubicado en el 544 de la calle Capp, entre las calles 20 y 21. Existe ayuda financiera para el pago de colegiaturas. Más información http://sfcmc.org.