Cuando se trata de hip-hop, particularmente en América Latina, se le debe mucho a África.

Y para Isnay ‘DJ Jigüe’ Rodríguez, un productor musical y DJ cubano, cuya mezcla de ritmos electrónicos, urbanos y africanos se conoce como Afrofuturismo Tropical, era hora de pagar esa deuda.

Es una deuda que se remonta a sus propios humildes comienzos en el hip-hop, cuando creció en Santiago de Cuba, a más de 500 millas de la capital, La Habana, donde ahora vive. Fue la escena de la música callejera de Santiago de los 80 y 90 la que alimentó su espíritu creativo hip-hop, adoctrinándolo primero en el breakdance antes de dominar las tornamesas.

Pero con La Habana dominando gran parte de la cobertura de la cultura, el arte y la música de la isla, nunca se ha contado la historia de la próspera e innovadora escena musical urbana predominantemente negra de Santiago. Hasta ahora.

Fotograma del documental ‘Bakosó: AfroBeats of Cuba. Courtesy: Eli and Kahlil Jacobs-Fantauzzi

El documental galardonado ‘Bakosó: AfroBeats of Cuba’ (2019), dirigido y producido por los hermanos Eli y Kahlil Jacobs-Fantauzzi, sigue a Rodríguez mientras se embarca en un viaje que rastrea los orígenes espirituales y ancestrales de un nuevo género musical de Santiago Bakosó: una fusión sincrónica de ritmos africanos de Angola, Ghana y Nigeria con sonidos tradicionales de Santiaguero.

“Siempre se contaba la historia de lo que sucedía en Habana, en la capital. Y esa era la cara que conoció el mundo de la música de jóvenes en ese momento. No se contaba la historia de lo que pasaba en otros lugares como en Santiago de Cuba, que siempre ha tenido una historia cultural y musical muy rica. Yo sentía siempre la necesidad de contar esa historia. Llega el momento del Afrobeat, la influencia de la música africana, y el momento perfecto para saldar esa deuda”. 

La película, que se estrena a nivel nacional a traves del PBS el 3 de mayo, no solo rastrea los orígenes musicales de Bakosó, sino que examina la histórica y resistente conexión espiritual de Cuba con el continente africano, una que está encarnada notablemente por los cimarrones, o africanos que se liberaron de esclavitud buscando refugio en la ladera cubana.

El productor musical cubano Isnay ‘DJ Jigüe’ Rodríguez (a la izquierda) escuchando al rapero cubano Ozkaro Delgado (a la derecha). Courtesy: Eli and Kahlil Jacobs-Fantauzzi

La película, que presenta a varios músicos afrocubanos, incluye al académico Dr. Raúl Miyares, experto en estudios africanos y caribeños, quien dice que “Cuba encarna el espíritu del Cimarrón… la capacidad de crear una nueva cultura que mantiene su raíz ancestral».

“Cuando lo piensas, cuando hablas de nuestras tradiciones, nuestras costumbres, nuestra espiritualidad, lo que tenemos hoy, viene de esos cimarrones”, dijo Eli. “Hemos pasado por todas estas cosas horribles de la colonización, que literalmente trató de prohibir los tambores, trató de prohibir nuestro idioma, trató de prohibir quiénes somos… Y después de todo, todavía tenemos eso. Qué honor, qué legado y qué alegría poder conservarlo».

Para los hermanos Jacobs-Fantauzzi, de ascendencia afropuertorriqueña, la película es la culminación de una relación de 20 años con Cuba. Fue durante la exhibición de Eli de su primer documental ‘Inventos: Hip Hop Cubano’ en Santiago, en 2005, que conoció a Rodríguez. Una amistad que se asemeja a la familia, floreció poco después. Pero no fue hasta después del segundo documental de Eli ‘HomeGrown: HipLife in Ghana’ (2008) que Rodríguez le contó lo que estaba sucediendo en su ciudad natal: los estudiantes africanos que vinieron a estudiar medicina a Santiago de Cuba fueron influyendo gradualmente en la escena musical local con Kuduro, de Angola, Afro House, de Sudáfrica y Azonto, de Ghana. Y de ahí surgió la idea de documentar el nacimiento de un nuevo género: Bakosó.

“Vemos un gran reflejo de nosotros mismos en las imágenes que retratamos en la película”, dijo Eli. “Estamos realmente interesados en contar una historia justa. ¿Cómo se ve la justicia en la narración de historias, donde no es excluyente y no estás extrayendo historias de las comunidades, sino que la estás contando junto con la comunidad? Nos dejan entrar en estos espacios, donde ni siquiera se estaba seguro de dejar entrar a una cámara en ese espacio».

Una de esas escenas se produce cerca del comienzo de la película que muestra a Rodríguez visitando a su abuela Mamá Cuca en Santiago. La película capta a Cuca rezando ante su altar a la diosa yoruba Yemayá y bendiciendo a Rodríguez en su viaje después de la lectura de caracoles.

Con la ayuda de un equipo de filmación compuesto por lugareños, la película capta la magia de Santiago. El resultado final es algo que no se siente escrito ni artificial, sino que suena a autenticidad. Y quizás lo más importante, la película visibiliza las imágenes a menudo ignoradas y borradas de los negros no solo en Cuba, sino en toda América Latina.

«Eso es algo en lo que realmente queríamos enfocarnos intencionalmente porque históricamente no ha sido parte de la conversación», dijo Kahlil. “Cuando miras los medios de comunicación y la piel de las personas y el color de sus ojos y la textura de su cabello, no representa realmente quiénes somos como personas. Y esas imágenes tienen un impacto profundo en cómo nos vemos a nosotros mismos y en la forma en que vemos el mundo que nos rodea».

Isnay ‘DJ Jigüe’ Rodríguez, productor musical cubano, junto al Monumento al Cimarrón en Mina de Cobre, Cuba. Courtesy: Eli and Kahlil Jacobs-Fantauzzi

Rodríguez está de acuerdo.

“Es una responsabilidad que pienso que tenemos todas las personas, no solamente los afrodescendientes. Pienso que es una responsabilidad de todos alrededor del mundo: de enaltecerse, sentirse orgulloso, y de representar y enseñar sus raíces. Por muchos años, las personas dominantes —blancos colonialistas— lo que han intentado es borrar las historias de los pueblos, de la gente. No solamente de la población afrodescendientes, sino también de los indígenas.

Tiene razón. Durante siglos, las historias, la música y las prácticas espirituales de las personas de ascendencia africana e indígena en el continente americano han sufrido múltiples intentos de exterminio cultural por parte de las potencias coloniales invasoras. Y cuando esas historias y prácticas culturales se mantienen vivas por pura resiliencia, a menudo quedan enterradas bajo la narrativa dominante impulsada por líderes políticos y controladores de los medios de comunicación.

Pero en palabras de DJ Jigüe: “Siento que con Bakosó estamos aportando a la causa”.

‘Bakosó: AfroBeats of Cuba’ se estrena en PBS el 3 de mayo, consulte la programación local para ver horarios adicionales. El Museo de la Diáspora Africana (MoAD, por sus siglas en inglés) de San Francisco albergará un debate virtual en un club de cine con Eli Jacobs-Fantauzzi el 16 de mayo, y el Fist Up Film Festival virtual proyectará la película el 27 de mayo. Visite fistup.tv para obtener más detalles.

¿Desea conocer más sobre los artistas destacados en la película? Consulte estos sitios:

Youtube Guampara Music

https://youtube.com/c/Guampara

Bandcamp  Guampara Music

Dj Jigue

Ozcaro Delgado

Kamerun

El inka