El área de la calle 24 tiene una de las más altas tasas de ausentismo escolar de San Francisco.

Bajo la ley de California, los niños de edades comprendidas entre los 6 y 18 años están obligados a asistir a la escuela. El ausentismo escolar crónico pone a los estudiantes en riesgo de deserción escolar, y el fiscal de distrito de San Francisco, Kamala Harris, observa una fuerte correlación entre la alta deserción escolar y la delincuencia. En los últimos cuatro años, el 94 por ciento de las víctimas de homicidios de San Francisco, menores de 25 años, no se graduaron de la escuela secundaria. Pero ahora San Francisco está afrontando una preocupante alta tasa de ausentismo escolar, utilizando una combinación única y controversial de intervención de servicios sociales y amenaza de enjuiciamiento.

De acuerdo al Distrito Escolar de San Francisco (SFUSD por sus siglas en inglés), la tasa de ausentismo es superior al promedio estatal y se agrava en los condados de Alameda, Contra Costa, Los Ángeles y San Diego. Siendo el la Misión uno de los barrios con mayor tasa de ausentismo escolar, el alcalde, Gavin Newsom, lo escogió para poner en marcha una amplia campaña de educación contra el ausentismo escolar. Caminando a lo largo de la calle 24, alentó a los miembros de la comunidad a contactar la oficina Truancy Assessment and Resource Center (TARC) si ven niños en la calle durante las horas de escuela.

TARC es una oficina centralizada donde los estudiantes y sus familias puedan exponer las dificultades que dan lugar a las ausencias injustificadas. Los trabajadores sociales realizan una evaluación del ausentismo por problemas psicosociales y académicos, y ayudan a enlazar a los estudiantes con los recursos prestados por los colaboradores de TARC como: el Departamento de Niños, Jóvenes y sus Familias; Huckleberry Youth Services and Urban Service YMCA. Según el director de TARC, Tacing Parker, en ningún caso TARC entrega a los niños o sus padres a las autoridades de inmigración.

TARC, sin embargo, trabaja con las autoridades, incluido el Departamento de Libertad Condicional de Jóvenes, el Departamento de Policía y el Distrito Escolar de San Francisco. Los padres de alumnos de primaria con ausentismo escolar pueden enfrentar multas de hasta $ 2,500 o un año de cárcel por no cumplir con las disposiciones contra el ausentismo. Kamala Harris sostiene que este método del “palo y la zanahoria” ha contribuido a reducir las tasas de ausentismo escolar. En los últimos dos años el número de ausencias crónicas de estudiantes de primaria se redujo en un 33 por ciento.

Jeff Adachi se opone a penalizar a los padres de absentistas. Sostiene que: “La atención debe centrarse en abordar la raíz del problema a través de los servicios sociales y con recursos necesarios, no criminalizando a los padres a través de un sistema de justicia penal ya sobrecargado”.

Robin Hansen es una especialista en educación especial y ex presidenta del Comité Consultivo de la Comunidad para Educación Especial del SFUSD. Al igual que Adachi, Hansen se opone a la persecución de los padres de estudiantes absentistas. Ella considera que las escuelas pueden acusar a los padres cuando sus hijos tienen razones válidas para las ausencias. Por ejemplo, conocía a un niño que estaba siendo gravemente intimidado en la escuela, sin embargo, la escuela no estaba afrontando el abuso. Los padres del estudiante no pueden hacer que su hijo vaya a clases y la escuela tras los padres por ausentismo.

“Los inmigrantes son especialmente intimidados por acusaciones de ausentismo”, añade Hansen. “Tienen miedo de perder la residencia, aceptan todo lo que diga la escuela, incluso si no están de acuerdo. Y, muchas veces, ni siquiera entienden los cargos, porque los servicios de traducción en el Distrito Escolar son muy malos.” Además, la mayoría de los padres no pueden pagar asesoría legal adecuada si están siendo acusados legalmente.

Igual que la norma SB1317 de San Francisco, un proyecto de ley estatal patrocinado por el fiscal de distrito Harris y el senador estatal Mark Leno, haría que los padres en California fueran a la cárcel o pagaran una multa, si no cumplen con las disposiciones contra el ausentismo escolar. Malaika Parker, directora de acción comunitaria para Asuntos de Justicia en Oakland, dice que culpar a los padres por el ausentismo escolar es una solución inadecuada y rápida para los graves problemas en las escuelas de California. Dice que: “Gran parte del debate sobre la reforma escolar se centra en cómo los padres deben actuar de otra manera, en lugar de mirar la raíz del ausentismo de los estudiantes en las escuelas”.

Sin embargo, Julio Moreno, profesor de la escuela de primaria Bryant, dice que la ley puede servir como herramienta. “En Bryant, nos comunicamos con los padres de los niños con ausentismo y tratamos de apoyarlos, pero tener una carta oficial de ausentismo escolar para ser enviada y reunirse con un representante de la Oficina del Fiscal que los instruya acerca de la ley, ayuda mucho”.

Según la oficina del alcalde, el enjuiciamiento de los padres de absentistas “sólo se produce en casos graves. La mayoría de las referencias a TARC reciben apoyo, tales como vivienda, servicios por abuso de sustancias o transporte. A los estudiantes no se los rechaza de TARC, incluso si los trabajadores sociales tienen que adaptar su estrategia o colocar al estudiante en un programa más intensivo. Esto podría incluir el enjuiciamiento, pero si son declarados culpables, las familias pueden elegir: entre pagar una multa o asistir de forma regular a la escuela y trabajar en TARC para desarrollar una estrategia de reinserción.

Para mayor información llame al: 415-437-1700

—Traducción Manuel Dueñas