El Supervisor David Campos interviene durante la reunión de inquilinos de los barrios de Misión y Excelsior en torno a la crisis de vivienda en San Francisco. Foto Olympia Zampathas

El Centro Comunitario Faro de la Misión se llenó de residentes de los distritos Misión y Excélsior el 23 de noviembre, al celebrarse una convención de inquilinos centrada en la creciente crisis de la vivienda y en las medidas a tomar para que la comunidad conserve sus vecindarios.

“Saben que están en lo cierto cuando el alcalde habla de la necesidad de hacer algo respecto a la Ley Ellis”, dijo el Supervisor David Campos.

Causa Justa (Just Cause), una organización de base con sede en Oakland, que tiene como objetivo lograr justicia para residentes de bajos ingresos, inició el evento motivando a los asistentes a participar en un foro abierto, dando la palabra a quienes quisieran compartir sus historias sobre la crisis de la vivienda.

“He vivido en San Francisco durante 36 años”, declaró Linda Post, que vive en un apartamento de seis unidades de renta controlada en la Misión. “He tenido mucha suerte.”

Otros no han tenido tanta suerte. Cuando un miembro de Causa Justa preguntó lo que se siente perder el hogar, las manos se alzaron por todo el salón queriendo responder.

Aunque muchos expresaron que preferirían un enfoque de acción directa a la crisis, los asistentes escucharon con atención al anunciarse que la convención se centraría en la evaluación de propuestas. El objetivo de la reunión fue votar o presentar propuestas que serían después sintetizadas y, finalmente, puestas en la boleta electoral de noviembre de 2014.

“La manera en que la política se desarrolla a menudo es (cuando) nuestros vecinos y nuestros barrios y nuestros miembros de la comunidad dicen ‘esto es un problema’, y luego como defensores de la política actuamos como si: ‘ok, vamos a ver si alguien ha hecho alguna vez algo sobre esto’”, dijo María Zamudio, Organizadora del Derecho a la Vivienda de San Francisco para CJJC.

Se están organizando otras cinco convenciones de inquilinos por toda la ciudad en los barrios más afectados por la crisis inmobiliaria. Estos barrios son Castro, Misión, Excélsior, Richmond, Western Edition, Haight, SoMa, Tenderloin, el Centro de la Ciudad y el barrio chino.

Después de que varios asistentes dieran sus testimonios, los moderadores pidieron al grupo ideas de lo que les gustaría ver en su barrio. Las ideas iban desde simples peticiones como ser capaces de caminar por el barrio con orgullo, hasta respuestas más contundentes tales como que los niños del barrio tengan la posibilidad de acceder a una vida mejor.

“Aquí en San Francisco tenemos una gran crisis, una crisis de vivienda y eso es lo que nos está reuniendo aquí”, dijo el Supervisor John Avalos, quien también habló en el evento. “Cuando trabajamos juntos así, podemos mover montañas y podemos cambiar cosas. Estoy comprometido a trabajar con ustedes desde el Ayuntamiento”.

Esta estrategia de base fue tomada y utilizada durante todo el evento, informar a los residentes que, de querer el cambio, tendrían que encabezar la lucha, y que eso no será fácil.

CJJC sugirió un enfoque legislativo y dar pequeños pasos para arreglar la crisis de vivienda, primero, mostrando una presentación informativa con diapositivas y una lección sobre las viviendas asequibles, el control de la renta, el aumento de los desalojos, el control de vacantes y las compras de inquilinos, para luego dividirse en grupos a discutir las propuestas de modificación de determinados aspectos de las leyes de vivienda a nivel de la ciudad.

“Algunas de ellas son ideas que la gente del barrio ha propagado a lo largo de los años basadas en modelos de otras ciudades”, dijo Zamudio al discutir de dónde vinieron las propuestas. “Muchas de ellas provienen de la necesidad”.

Al cierre de la reunión, se incluyeron tres propuestas en la lista final. Una, creada allí mismo por los inquilinos de la convención, incluía limitar las rentas en un 30 por ciento del ingreso medio del barrio, una moratoria de los desalojos no culpables y la expropiación de la propiedad a los dueños que acosen a sus inquilinos. La elección final de la propuesta de los distritos se hará en la próxima reunión, a principios de enero.

La reunión concluyó con un canto de cierre, cantado en inglés y español: “Es nuestro deber luchar por nuestra libertad. Es nuestro deber ganar. Amarnos y protegernos mutuamente. No tenemos nada que perder más que nuestra vergüenza”.

Aunque no se han decidido aún las fechas para futuras reuniones, Causa Justa tiene previsto celebrar su convención de inquilinos en toda la ciudad a finales de enero o principios de febrero.

“Es natural ver cambiar los barrios”, dijo Brenda Cruz, que creció en el Excelsior y actualmente reside en Pleasanton. “Pero es triste ver cambiar a La Misión como cualquier otro barrio”.

Para obtener más información, póngase en contacto con Causa Justa (Just Cause) a través de su página web, www.cjjc.org.

—Traducción Emilio Ramón