Dolores Huerta habla ante el público durante una celebración en su honor en la Mission Language and Vocational School. Photo Mabel Jimenez

La Misión rindió homenaje a Dolores Huerta por la Medalla Presidencial de la Libertad que el pasado 29 de mayo recibiera de manos de Barack Obama, Presidente de EEUU.

Durante la tarde del domingo 30 de septiembre, se realizó un acto benéfico a nombre de la Fundación Dolores Huerta que fue a la vez marco para el festejo de la condecoración otorgada a la activista.

“Cada vez que se hablaba de querer hacer algo para festejar lo de la medalla, yo pensé, bueno, yo quiero que se haga aquí en la Misión. A veces la gente se olvida acerca de la Misión, y se trata de una de las zonas más viejas e importantes de San Francisco”, dijo Huerta al momento de tomar el micrófono.

El acto, que contó con la participación de miembros de la comunidad y varias personalidades públicas, tuvo lugar en la Mission Language and Vocational School, ubicada en el 2929 de la calle 19. El acto comenzó con una danza ceremonial azteca interpretada por el grupo de baile ‘Xitalli’, para luego dar inicio con las palabras de reconocimiento.

“Es la más alta condecoración que puede recibir un civil en este país (…). Ella honró a la medalla; ella le concedió brillo al aceptarla”, expresó Nancy Pelosi, representante de la cámara baja del Congreso de EEUU.

Por su parte, Mark Leno, Senador de la Asamblea Legislativa de California, declaró, luego de entregar a Huerta una proclama proveniente del Senado: “En el Senado Estatal, en la Junta Administrativa de la ciudad, en el Congreso, en las calles, trabajando en nuestras organizaciones comunitarias, donde nos encontremos, todos sabemos que Dolores Huerta es nuestro compás moral y nuestra conciencia social”.

Dolores Huerta con Nancy Pelosi en la Mission Language and Vocational School. Photo Salvador Martinez

La celebración estuvo enmarcada por un ambiente alegre y festivo en la cual los presentes se deleitaron bebiendo sangría y saboreando distintos platillos. La música no podía faltar en el acto, por lo que se contó con un mariachi femenil encargado de amenizar la tardeada.

“No todos pudimos asistir a Washington, y nosotros también queremos ser parte de este homenaje de una forma local. No se le dio la medalla a una sola persona sino que se reconoció el trabajo organizativo y nuestra lucha en esta nación por los derechos independiente de cuál sea tu posición”, indicó Patricia Lebrón, trabajadora en pro de los derechos del campesinado.

La tardeada en honor a Huerta fue fruto de la labor conjunta de Lebrón, Eva Royale y Beth Mosleny, organizadoras del ‘Día de Cesar Chávez’, así como de Ana Cervantes, de la Unión de Campesinos y Rosario Anaya, directora del Mission Language and Vocational School.

Dolores Huerta es conocida como paladín de los trabajadores agrícolas, líder laboral, feminista y defensora de los derechos de los homosexuales. Inició su carrera como activista en 1955, en Stockton, California, cuando ayudó a fundar la Community Service Organization o ‘CSO’ (Organización de Servicio a la Comunidad), luchando en contra de la segregación, realizando el registro de votantes y demandando mejoras en los servicios públicos; allí es donde conoce a Cesar Chávez. En 1962, Dolores y Chávez forman la National Farm Workers Association o ‘NFWA’ (Asociación Nacional de Campesinos), organización que más tarde llegaría a ser parte de la United Farm Workers of America, ‘UFW’ (Unión de Campesinos).

“Este reconocimiento representa el apoyo de muchas personas que trabajaron muy duro para ayudar a los campesinos, para hacer los cambios, como por ejemplo el matrimonio de personas del mismo sexo, la lucha por los derechos civiles para nuestros migrantes. Así es que yo me siento como bendecida porque recibo la medalla, pero está el apoyo y el trabajo de miles y miles de personas que trabajan por la justicia social”, declaró Huerta.