Gracias al alto porcentaje de estudiantes de inglés como segunda lengua y de bajos ingresos, escuelas del Distrito Escolar de San Francisco como la Mission Foto Courtesy https://mhs-sfusd-ca.schoolloop.com/

La propuesta para el presupuesto a educación del Gobernador reduciría el control del estado de California sobre las finanzas en este rubro. La propuesta, a concretarse este verano, daría control a los distritos escolares locales, haciendo de esta reforma la más significativa en treinta años.

“Es una de las discusiones más importantes que se está dando en la nación”, dijo Arun Ramanathan, Director Ejecutivo de Educación Trust-West, en un notificado difundido el 13 de marzo por Noticias Nueva América, “estamos en un punto crítico en este momento, estas leyes tienden a quedarse”.

Mientras en 1972 California figuró entre los primeros veinte que gastaban en educación por alumno —siendo los impuestos locales sobre propiedad su mayor fuente de ingresos— ahora está entre los más bajos de la nación. Desde la aprobación de la Propuesta 13 en 1978, los distritos escolares han dependido de provisiones estatales, las cuales desde entonces han disminuido ante al decline económico.

La propuesta del Gobernador incluye una Fórmula Local para el Control de Fondos (LCFF), que aumentaría los fondos al asignar un gasto uniforme de $6,800 por alumno en cada distrito. Dicho gasto regresaría a los distritos a un nivel de fondos similar al tenido en 2007-2008, el año previo a que los legisladores estatales recortaran el presupuesto asignado a los niveles de preescolar a bachillerato por $7.2 billones.

Para estimular la equidad, la LCFF proveería un apoyo adicional de $2,385 por cada estudiante ­—que esté aprendiendo inglés, de bajos recursos y niños de crianza temporal— en cada distrito. A distritos donde más de la mitad de los estudiantes estén en desventaja, se les asignará un recurso adicional. Por ejemplo, un distrito con 60% de estos estudiantes especiales recibiría un apoyo de $2,624 por alumno. Los fondos adicionales se limitarán a $3,578 por distrito donde los estudiantes en desventaja representan toda la población estudiantil.

Existe preocupación de que el gasto uniforme por sí solo sea insuficiente para escuelas con baja población de estudiantes en desventaja.

“Hay distritos suburbanos a los cuales les han reducido el 25% de su presupuesto”, dice John Fensterwald, Editor y Co-escritor de Edsource Today. “El dinero para libros de texto y capacitación para maestros nunca fue parte del gasto corriente, era parte del recurso categórico, independiente de programas que se han eliminado”.

Los fondos categóricos generados por el Estado son para programas como Ayuda de Impacto Económico para estudiantes de bajos recursos y gastos de transporte para estudiantes de educación especial. Estos fondos categóricos, los cuales suman sesenta, también son empleados para materiales educativos y capacitación para maestros. La LCFF eliminaría la obligación del Estado de proveer fondos categóricos en favor del gasto corriente. La razón detrás de esto, es cambiar la autonomía de los distritos locales para motivar el aumento de la igualdad.

¿Qué significa esto para las escuelas de San Francisco?
Más de la mitad de los estudiantes del Distrito Unificado de San Francisco (SFUSD, por sus siglas en inglés) reciben alimentos gratuitos o a precio reducido (un indicador de su estatus de bajos ingresos) y aproximadamente una tercera parte está aprendiendo inglés.

Estos índices demográficos califican al SFUSD para recibir apoyo adicional. El año pasado, el gasto por alumno en el SFUSD fue de $7,250. La LCFF está diseñada para aumentar estos fundos anualmente, de $7,259 el próximo año a $11,171 para el 2019.

El SFUSD actuará autónomamente en la asignación de estos recursos donde considere necesarios. Los escépticos temen que el recurso adicional no llegue a los estudiantes con desventajas.

“De aquí a 7 años, el distrito no tiene que reportar estos incrementos presupuestales. Solo debe reportar los dólares que está gastando en el 2012”, dice Fensterwald. “Es una gran oportunidad para negociar”.

Paul Monge-Rodríguez, Asociado de Justicia Educativa de Abogados Coleman, una organización no lucrativa que aboga por los jóvenes en San Francisco, declara: “Yo diría que la pieza más crítica es que la comunidad tiene un alto nivel de presencia… están usando dólares públicos para que tengamos el derecho a acceder al proceso de toma de decisiones”.

—Traducción Carmen Ruiz