Foto Maria Reyna

El reciente aumen-to de la violencia entre los jóvenes residentes de  la Misión, registrada en los últimos dos meses, ha unido a los miembros de la comunidad para promover un ambiente pacífico y seguro.

Un reporte reciente de la Policía (SFPD) revela que, desde el 16 de septiembre, cinco balaceras resultaron en fatalidades a individuos de entre los 19 y 28 años de edad.

En septiembre, Jesús “Chuy” Solís, de 20 años, fue víctima de violencia.

Valerie Tulier, director de la Mission Beacon Community Initiative y miembro del Mission Peace Collaborative, ayudó a organizar una marcha de paz, llevada a cabo el 24 de septiembre, en respuesta al ambiente de violencia vivido. La marcha comenzó en la calle 24 y la Misión, concluyendo con una reunión en el Garfield Park —donde se erige un altar en honor a la muerte de Solís.

“Quisimos enviar un mensaje a todas las comunidades, que promovemos y apoyamos la paz. Estoy contenta de que miembros de las familias de las víctimas estuvieron presentes al igual que jóvenes y madres que han perdido a sus seres queridos”, dijo Tulier.

Jeanne Hallacy, maestra de la Jamestown Media School, llevó a sus estudiantes de cuarto y quinto grado a foto-documentar la marcha.

“La marcha de la paz fue una manera de documentar la respuesta de las comunidades (ante la violencia)… quedó muy claro que la comunidad quiere mantener las calles seguras”, continuó Hallacy. “Los medios de comunicación involucran a los niños otorgándoles voz y cada uno ha tenido diversas maneras de responder”.

Un nuevo abordaje
El jueves posterior a la última balacera que, el 30 de octubre diera muerte a José Matias-Aguilon, de 28 años de edad, el Supervisor Campos llevó a cabo una conferencia de prensa en el City Hall.

El Capitán Robert Moser, de la Mission Police Station reveló detalles sobre las balaceras y comentó el esfuerzo para expandir la presencia policiaca en la Misión.

“Como resultado de varios programas anti-violencia que se llevaron a cabo la semana pasada, hemos hecho doce arrestos, decomisado dos armas, otra arma adicional y realizado numerosos contactos con aquellos que están predispuestos a la violencia”, dijo Moser.

Moser confirmó que tres de los cinco tiroteos (o balaceras) parecían estar relacionados a las pandillas, y que en los últimos dos, se han llevado a cabo dos arrestos; de acuerdo al Capitán, el más joven de los sospechosos es un joven de 14 años.

El Supervisor Campos remarcó la importancia de colaborar con diferentes fuerzas para lograr soluciones conjuntas.

“Nunca he visto tal nivel de cooperación y coordinación entre el departamento de policía y los trabajadores de prevención contra la violencia. Hubo un tiempo en el cual no se hablaban el uno al otro, pero ese ya no es el caso”, dijo Campos.

Ricardo García-Acosta, director del Northwest Community Response Network (CRN), una organización comunitaria basada en la colaboración, que atiende a familias en crisis y jóvenes con alto riesgo discutió, durante la conferencia, los triunfos de las estrategias contra la violencia.

García explicó que el CRN ayudó con los costos funerarios de las dos muertes (no relacionadas con pandillas), además de proveer tratamiento adecuado para sus familiares.

“Hemos estado calmando la tensión que existe en los sitios vigilados… [Nosotros] no solo apoyamos a los jóvenes y mujeres que están en proceso de guardar luto, sino también les ayudamos a sobrellevar su coraje por la pena y dolor”, dijo García.

Campos anunció que ayudó a asegurar $30.000 para CRN con el fin de reducir la escala de violencia. Los costos de la presencia policiaca y equipos especiales de grupos de investigación no fueron revelados.

“En los pasados cinco o seis años, hemos notado una tendencia a la propagación de la violencia”, explicó Tulier, quien trabaja muy de cerca con CRN.

Tulier expuso su molestia con Diana Oliva-Aroche, directora de los servicios de prevención de violencia del Alcalde, al incrementar los fondos al San Francisco Organizing Project (SFOP), una organización basada en fe, en lugar de hacerlo con otros grupos pro-paz y anti-violencia.

A lo largo de los dos últimos meses la Misión ha mostrado la capacidad de mejoría y determinación de una comunidad próspera. A través de marchas pro-paz y de involucrarse con la alcaldía, la Misión pide el apoyo de la comunidad y de los oficiales de la ciudad, para promover sanar las heridas causadas por la violencia, y fortalecer los lazos de paz.

—Traducción Emilio Victorio-Sánchez