Tengo que ser sincera. Tengo una relación muy cercana con este documental. Y con María, su protagonista, quien me recibió varias veces cuando viví en San Salvador, durante y después de la firma de los Acuerdos de Paz y el período de ‘Reconciliación’.

María Navarrete, conocida como María Chichilco, fue comandante guerrillera desde 1979 hasta los Acuerdos de Paz de 1992 durante la guerra civil de El Salvador. Luchó en el departamento de Chalatenango como líder campesina y militante del FMLN, el Frente Farabundo Marti para la Liberación Nacional, que peleaba contra un gobierno represivo respaldado por los EEUU, en lo que era una campaña brutal para aplastar así llamadas tendencias ‘comunistas’ del pueblo.

No más comenzar a ver la película, empecé a sentir unos grandes goterones resbalando por mis cachetes. ¿Por qué? Porque la película es una expresión poética del amor a la humanidad, a los sueños de justicia social y a un pasado de esperanzas e ideales que todavía no se ha llevado a la realidad.

Mediante la película, descodificamos el pasado viéndolo en un contexto actual, con los cambios que han ocurrido desde entonces y las muchas esperanzas aún fuera del alcance.

La Historia de María se estrenó en 1990 y esta reedición incluye una entrevista con María en donde reflexiona sobre ese período de su pasado y el estado de la justicia en El Salvador en el año 2010.

Al explicar la relevancia de esta nueva edición, la directora Pamela Cohen observó “la historia de esta mujer, es la historia de una madre y de una familia y esas cualidades son universales y trascienden el momento. La idea de la lucha de una mujer por su familia y la comunidad y en términos de dónde estamos 20 años después, todavía tenemos que estar inspirados.”

La Historia de María está filmada de una manera muy bella, teniendo en cuenta que se realizó hace más de dos décadas, cuando la tecnología para la filmación era otra, utilizando una técnica nueva para esa entonces que se llamaba video de pequeño formato.

Aún más impresionante es que el camarógrafo grabó su material con mano firme en medio de un ambiente sumamente peligroso y combativo.

La directora logró mantener un documental sobre el aspecto humano, más que centrarse en el sensacionalismo de las imágenes de guerra.

Observamos detalles exquisitos del campo pacífico en medio de un mundo violento: cascadas puras cayendo por rocas cubiertas de musgo verde y resplandeciente, la madrugada vestida de una mezcla de colores anaranjados y rosados tejida con la neblina sobre las cimas en la distancia, las copas de los árboles luciendo el sol por las aperturas como un encaje hecho a mano.

La manera con que la cámara nos deja entrar a la vida diaria de esta mujer y su familia es intensamente íntima. Escogieron con precisión los momentos más sencillos y habituales de la vida de María para contarnos su compleja historia y la de su país.

Es por medio de estos encuentros que el público llega a entender el conflicto interno y el sacrificio desmesurado de esta familia al tomar esas opciones existenciales.

Vemos la ternura con que su esposo José quita una migaja de comida de la falda de su María mientras cenan sentados en una barranca, sabiendo que el día siguiente van a tener que separarse por más de un mes, o posiblemente para siempre. O la delicadeza con que la hija cuida el pie dañado de su mamá después de caminar varios días con unos zapatos viejos llenos de agujeros.

La intimidad de esa película a veces llega al borde de lo aceptado, mencionando la propia María en una entrevista a www.elfaro.net: “Hasta me filmaron un día pelada, bañándome. Fíjese que ese día el camarógrafo estaba encaramado en un palo de amate arriba del chorro… diga gracias a que no estábamos más peladas.”

La película adolece una mayor explicación del por qué la guerrilla estaba compuesta por tantos jóvenes combatientes. Para compensar la masiva ayuda monetaria de EEUU al ejército, la muerte de 70.000 personas y la destrucción total de pueblos enteros en el campo, a la guerrilla no le quedaba de otra que reclutar a todos, jóvenes incluidos. En el conflicto armado de El Salvador esa dinámica fue única y chocante.

La Historia de María nos presenta una perspectiva preciosa sobre un pasado doloroso y lleno de pasión para un cambio a lo mejor. De alguna manera, los sueños de María se cumplieron. Después de pelear tan fervorosamente por la toma de poder, 19 años después llegó la victoria en las urnas para el FMLN, cuando en 2009 los ex guerrilleros se convirtieron en un partido político poderoso.

Puesto en palabras sabias de María Chichilco “personalmente me siento satisfecha de haber puesto un poquito. Yo no iba ser la liberadora de todo el mundo. No es así, vaya uno así piensa, uno quisiera ser cosas grandes pronto pero no se puede. Yo entiendo que la vida y el desarrollo de la humanidad es un proceso y es un proceso largo. Algunos hemos hecho algo, un paso, estamos tratando de empujar otro paso… y otros entrarían a hacer otros.”

‘La historia de María’ se presentará el próximo viernes 4 de junio a las 7 de la tarde en el Centro Cultural de la Misión (número 2868 de la calle Misión a la altura de la calle 24). Después de la película, habrá un debate en el que participará la directora Pamela Cohen. Más información: www.missionculturalcenter.org