Photo: Cassie Ordonio

Estimados lectores de El Tecolote:

El Mission Language and Vocational Center (MLVS) desea tener la oportunidad de responder al artículo de Gabriela Alemán, publicado en este periódico el 1 de junio de 2017. Desafortunadamente, MLVS no se le pidió emitir ningún comentario respecto a las preocupaciones manifestadas antes de que el artículo se hiciera público.

En cualquier institución, habrá estudiantes y empleados con inconformidades que requieran ser atendidas, como es nuestro caso. Esta institución se rige por la calidad de su educación. En nuestro programa de Cocina Profesional, los estudiantes aprenden de todo, desde seguridad y sanidad, habilidades de cuchillo, pasta y pizza, opciones de carne, mariscos, salsas, panes, ensaladas y más. Daremos seguimiento a las preocupaciones de la comunidad estudiantil con reuniones directas y la aplicación de encuestas anónimas para que expresen sus inquietudes. La toma de represalias no está en nuestro vocabulario, y las preocupaciones de los estudiantes son respetadas y tomadas en serio en todo momento.

MLVS tiene contratos con la ciudad que no cubren necesariamente el costo de impartir cada programa. MLVS hace importantes contribuciones en especie para el presupuesto de suministro de alimentos y otros costos. Si bien el presupuesto incluye alimentos para uso práctico en la cocina, no existe recurse para grandes porciones de comida que cada estudiante consume, pero tratamos de incluirlo, tan a menudo como sea posible, como un beneficio en el programa, aunque no siempre se puede agregar más, porque se sigue operando con un presupuesto reducido, como muchas pequeñas organizaciones sin fines de lucro. MLVS trabaja duro para llegar a fin de mes dentro de sus limitados recursos y para continuar nuestra misión de proporcionar educación de calidad gratuita a los más desatendidos.

Respecto a la reunión de la Junta Pública del MLVS el 18 de mayo (no el 11 de mayo): los avisos fueron colocados en el edificio para los estudiantes, el personal y el público por adelantado, y todos fueron bienvenidos. MLVS cree que hubo una falta de comunicación entre el Chef Instructor Raúl García y los estudiantes. El chef Raúl no necesitaba ayuda para colocar 50 sillas ni pagar salarios adicionales para ello (los estudiantes que trabajan, reciben su correspondiente remuneración). “Sólo una reunión de la comunidad” se refirió a la falta de preparación requerida, lo cual no significaba que los estudiantes no fueran bienvenidos. Se anticipó que los estudiantes habrían asistido, pero muchos de ellos están ocupados en la tarde con trabajos u obligaciones familiares. Después de la reunión, el director habló con los estudiantes sobre lo que había resultado en ella, y los invitó a expresar cualquier preocupación. Seguiremos involucrándolos, hablando con las clases directamente, y publicando y asegurando su participación en la toma de decisiones. La comunidad de MLVS es, ante todo, la integrada por sus estudiantes.

La práctica de preparación de banquetes se implementó como una oportunidad para ofrecer entrenamiento y prácticas en sitio, cuando el plan de estudios lo permite. Esto ha ocasionado conflictos entre el currículo y la atención de banquetes, una práctica que se ha suspendido. Mientras que la transición estaba sucediendo, algunas clases fueron canceladas por necesidad. El material ha sido ajustado para compensar este tiempo y asegurar que todo el conjunto de habilidades y módulos sean cubiertos en su totalidad. También ofrecemos clases adicionales o tiempo de tutoría para compensarlo, según sea necesario.

Las clases de inglés se ofrecen a las 8 de la mañana, todos los días, antes de la sesión culinaria específica y práctica en la cocina.

Si bien es cierto que se ha alquilado la cocina, tales actividades no interfieren con la impartición de clases. Los estudiantes tienen acceso al equipo necesario para la lección de cada día, sin importar el uso compartido del espacio. Creemos que tener actividades adicionales en la cocina puede mejorar el aprendizaje de los estudiantes, dándoles experiencia en la vida real de trabajar en una cocina de equipo grande y completamente operativa. El equipo adicional para proyectos secundarios puede no estar disponible en esas ocasiones, pero ello no interfiere con el plan de estudios.

MLVS y su personal trabajan arduamente para proporcionar a los estudiantes una educación de calidad, con poco o ningún costo para los estudiantes calificados de bajos ingresos, a través de subvenciones con la Ciudad y el Condado de San Francisco, a través de la Oficina de Desarrollo Económico y de la Fuerza Laboral, Desarrollo Comunitario, el Departamento de Niños, Jóvenes y sus Familias, y la Agencia de Servicios Humanos. Estos fondos son una mezcla de fondos locales y federales otorgados por la Ciudad. MLVS está en excelente posición con estas agencias de financiamiento, y ha estado consistentemente cumpliendo o superando las metas de inscripción, finalización y colocación laboral en los últimos tres años.

Como un contratista del gobierno, MLVS es monitoreada regularmente y cuenta con el aval de la Oficina de Educación Primaria y los acuerdos de inscripción recientemente actualizados para ajustarse a las actualizaciones legislativas. También implementamos libros de texto actualizados; los profesores han revisado recientemente el plan de estudios y seleccionado material más relevante que el anterior. No todos los contratos de entrenamiento cubren el costo de los libros de texto. Como cortesía, MLVS proporciona copias de folletos y currículo si un estudiante no puede comprar libros de texto.

Si un estudiante necesita ayuda con la compra de libros, MLVS se esfuerza en subsidiarlos, o ayudar a localizar libros en oferta o usados. Esto se cubre durante la orientación. En respuesta a esta preocupación actual, MLVS encuestará a los estudiantes para asegurar que todos tengan acceso a un libro de texto.

Los estudiantes reciben un cuchillo al final del programa, como un incentivo para concluir y triunfar. Al inicio del programa, se les asigna un uniforme. Se ofrecieron uniformes adicionales al comienzo del programa, pero los estudiantes optaron por otros pequeños artículos adicionales (peelers, tijeras, un cuchillo asignado para uso en clase). Los estudiantes pueden comprar un segundo uniforme bajo solicitud. La referencia de haber solicitado uniformes al Ayuntamiento no es correcta.

MLVS está constantemente buscando mejorar y toma esto como una oportunidad para comunicarse mejor y crecer con nuestros estudiantes. Gracias por tomarse el tiempo para leer nuestra respuesta y por favor considere visitarnos y participar con los estudiantes en sus experiencias en el aula. Para obtener mayor información sobre nuestra institución, visite www.mlvs.org, donde también encontrará oportunidades para apoyar a los estudiantes en nuestros programas a través de una contribución deducible de impuestos.

Natalie Hopner

Directora Interina