MÉXICO: EL MOVIMIENTO YO SOY 132 CERCA LA CADENA TELEVISA
El pasado jueves 26 de julio manifestantes del movimiento mexicano Yo Soy 132 marcharon hacia el edificio del canal de Televisa en la capital de México con la intención de sitiar durante 24 horas sus instalaciones en una acción simbólica y pacífica que denuncia la “manipulación” de la campaña electoral a favor del candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Peña Nieto. Entre gritos de “México sin PRI” y cargando pancartas con lemas como “Queremos escuelas, no telenovelas”, miles de personas, entre ellas sindicatos y organizaciones civiles, caminaron bajo la lluvia hasta Televisa, donde los esperaba un fuerte dispositivo policial. Los manifestantes, haciendo una cerca “pacífica”, llamaron a los participantes a “evitar cualquier confrontación con los cuerpos policíacos o con los de la seguridad de la empresa”. Mientras continúan las protestas, la coalición izquierdista Movimiento Progresista ha propuesto el nombramiento de un presidente interino mientras se estudia la invalidación de las elecciones del pasado 1 de julio.

ESPAÑA: BALTASAR GARZÓN DEFENDERÁ A JULIAN ASSANGE
El ex juez español, Baltasar Garzón, liderará el equipo jurídico que representa al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, quien se encuentra en la embajada ecuatoriana de Londres en la que se refugió desde el pasado 19 de junio para evitar ser extraditado a Suecia donde está siendo acusado de delitos de agresión sexual y a la espera de la respuesta del Gobierno de Ecuador a su pedido de asilo. El proceso contra Assange se inició a finales de 2010 luego de que el portal WikiLeaks publicara más de 250.000 cables secretos del Departamento de Estados de Estados Unidos que desataron un huracán diplomático a nivel mundial. El rechazo de Washington a la publicación fue tajante. Garzón mostró su “grave preocupación por la ausencia de garantías” con la que se está actuando contra Assange y buscará demostrar “el proceso secreto que se sigue en los Estados Unidos…” contra Assange. Éste sería entonces el primer gran caso que afrontaría Baltasar Garzón como abogado, tras su célebre trayectoria como magistrado y luego de haber hecho efectiva, en 1998, la orden de captura contra Augusto Pinochet por su responsabilidad en los crímenes de la dictadura en Chile. El Tribunal Supremo de España condenó a Garzón a 11 años de inhabilidad como juez a principios de este año.