Policía controla la multitud de personas que reaccionan al le pérdida de Brasil por 1-7 a Alemania en la Copa del Mundo de 2014. Photo Jorge Rodriguez Vargas

Río de Janeiro–Las expectativas eran muy altas. Toda la nación anfitriona se unió, esperando tomar otro paso hacia su sexta Copa del Mundo. Incluso sin su estrella goleadora, Neymar, los brasileños estaban muy entusiasmados con el partido de semifinales contra Alemania el 8 de julio –hasta que los alemanes anotaron muy temprano.

Lo que jamás nadie podría haber imaginado sucedió en el Estadio Mineirão: Brasil sufrió su peor derrota en la historia de la Copa Mundial, perdiendo ante los impresionantes teutones por un marcador final de 7-1.

Los aficionados en el estadio no podían comprender lo que estaba pasando. Los alemanes, con la fuerza de un camión, destruyeron la defensa brasileña. Brasil no pudo hacer nada para detenerlos. Para el final de la primera mitad, el marcador era de 5-0.

«No puedo creer lo que estoy viendo aquí. Yo simplemente no lo puedo creer», dijo Marcio Araujo, un fan que estuvo presente en el partido.

En todo el país, las personas lloraban. Brasil fue sede de la Copa del Mundo por primera vez en 64 años, y no se espera nada menos que llegar a la final.

“Ahora lo único que podemos hacer es ver a los argentinos jugar en el Maracanã y los brasileños quedan fuera de él”, dijo Marcelo Metro, un joven aficionado brasileño que viajó desde Sudáfrica para presenciar la Copa del Mundo. “Ya valió”.

Para los brasileños todavía es muy difícil entender lo que pasó. Incluso Luiz Felipe Scolari, Director Técnico de la selección brasileña, tuvo dificultades al explicarlo.

“Fueron cinco minutos relámpago que simplemente nos arrebató el partido. Nunca había visto algo así”.

Tomará tiempo para que el pueblo brasileño se recupere de esta pérdida, tal vez décadas. Especialmente para aquellos niños que lloraron durante el torneo y para aquellos que se acostumbraron a ver el brillo del fútbol brasileño con su marca clásica del “joga bonito” o “juego hermoso”.

Traducción Yezel Rosales

Policía controla la multitud de personas que reaccionan al le pérdida de Brasil por 1-7 a Alemania en la Copa del Mundo de 2014. Photo Jorge Rodriguez Vargas